Existe un viejo refrán optimista que dice, “no hay mal que por bien no venga”, aunque la periodista Laura Ripoll no estaría del todo conforme. A través de un video en su cuenta de Instagram, la influencer que está cerca de los 30 mil seguidores en esa red social, describió “las cosas que odia” en cuanto al uso de las nuevas tecnologías.
Además de mencionar el problema de los teclados y “diccionarios” “cuando te cambian las palabras” y en la vorágine de su rutina olvida chequear lo que escribió, hizo principal hincapié en la viralización de “chismes” que circulan para “tirar mierda a alguien”, sin sustento informativo real con datos básicos como el nombre y apellido en cuestión.
“Hay personas que ensucian a otras pero no te pasan los datos concretos. Si me vas a pasar información vení con pruebas, con datos, no hablar por hablar. Hay mucha envidia, mucha gente al dope mirando redes sociales e inventando cosas. Dejen vivir a la gente”, lanzó indignada.
Inmediatamente obtuvo una serie de respuestas que respaldaron las afirmaciones de Laura. Entre ellos, una comprometedora palabra al enviar un mensaje sin chequear lo escrito y un clásico “chisme de barrio”, de los más habituales y con menor sustento: ¿Desconocimiento o crueldad?.|
