Todo parecía estar en contra. Es que la influencer Yani Solfer vivió una verdadera odisea nocturna tras llegar a la 1:30 a.m. a un departamento reservado por Airbnb… y descubrir que estaba ocupado. El inconveniente no solo la tomó por sorpresa a ella, sino también a su pequeña, quien se mostró angustiada ante la situación.
“No saben lo mal que me sentía quería pensar que era una pesadilla, porque si andas sola no pasa nada pero estaba con Juli y ella se puso re mal, tenía sueño quería dormir, les juro que hace mucho tiempo no sentía así de triste”, contó a sus seguidores.
La noche ya venía complicada: vuelos retrasados, la pérdida de un álbum en el aeropuerto, un celular sin batería por un cargador que no funcionó, y un Uber que dejó a las viajeras tres cuadras antes de su destino. Pero el golpe final fue toparse con el alojamiento ocupado y sin respuesta inmediata de la plataforma.
Sin opciones claras, y con hoteles de la zona llenos, uno de los conductores del Uber ofreció una alternativa inusual: pasar la noche en un departamento vacío de un edificio donde él trabajaba como encargado. “No sabía ni a quién pertenecía, pero no tenía muchas opciones. Y ahora estoy en once en un departamento de quién sabe quién pero una nunca sabe. Yo no soy de confiar así pero bueno no tenía tantas opciones”, relató.
Ya más tranquila, compartió la experiencia como una más de sus clásicas anécdotas pero con el humor que la caracteriza: “ustedes entienden, los que me siguen desde siempre, ya saben el desastre que es mi vida: me vivo olvidando cosas o haciendo algo mal”… Es que a veces, viajar es dejarse llevar por el caos… y tener buena suerte con los choferes. Pero igual ¡Qué susto, Yani!
