El periodista Santiago Solis, en “modo turista”, se reinventó y no solo se luce en televisión. En el último tiempo se luce en divertidos videos sobre distintos puntos icónicos de Posadas, revelando datos turísticos, anécdotas y curiosidades. En unos de sus recientes recorridos visitó el Pasaje de la Ribera, un pintoresco rincón frente a la calle Guairá, entre Ángel Acuña y Roque González, junto al Anfiteatro Manuel Antonio Ramírez. Por su colorido y su atmósfera, el lugar suele ser comparado con el famoso Caminito de Buenos Aires, aunque conserva un encanto y una identidad profundamente posadeña.
Mientras paseaba por sus callejones, Solis recordó que este pasaje es uno de los pocos paisajes que mantienen viva la esencia de la Posadas de antaño. Décadas atrás, en lugar de las 20 familias que hoy lo habitan, vivían allí al menos el triple. El río era el centro de la vida social: los hombres se dedicaban a la pesca, muchas mujeres a la lavandería, y los barrios cercanos estaban unidos por estos pasajes. Con la llegada de la costanera y la modernización de la ciudad, gran parte de sus pobladores fueron relocalizados a barrios como San Lorenzo y Yacyretá, cambiando para siempre la dinámica del lugar.
Actualmente, la Municipalidad de Posadas lleva adelante trabajos de puesta en valor del Pasaje de la Ribera, dentro de un plan integral para realzar espacios públicos y destacar su importancia histórica. Con su cámara en mano, Solis logró capturar no solo la belleza visual de este rincón, sino también la memoria de una comunidad que, pese a las transformaciones, mantiene viva su identidad.
