El viajar por el mundo y a pulmón tiene su lado amargo y no siempre los bellos paisajes o las hermosas postales que se inmortalizan en nuestra retina pueden llegar a satisfacer nuestras necesidades económicas.
Es así que el sueño que vienen sosteniendo desde hace más de un año, la cantante misionera, Pamela Ayala junto a su novio Jeremías se convirtió en un Infierno. Su viaje a pulmón por Europa los llevó a Serbia y Montenegro dónde sus trabajos temporales le ocasionaron más malestar psicológico que otra cosa.
«Después de casi 24 horas viajando en colectivos, perdiéndonos, quedándonos varados en medio de la montaña y sobreviviendo como podíamos, llegamos finalmente al campamento en Montenegro. Pero lo que nos esperaba ahí fue otro nivel de locura… 🤯 Los dueños del lugar nos vendieron un cuento que nada tenía que ver con la realidad. Nos engañaron con todo: el trabajo, las condiciones, el trato… Fue de esos momentos en los que decís: “¿Qué hacemos acá?”. Pero en medio del caos siempre hay luz, y esa luz fueron nuestros compañeros de trabajo. Gracias a ellos pudimos hacer llevadera la situación y encontrar esos momentos de risas y compañía que salvan cualquier experiencia».
«Es una exclavitud disfrazada de mucha manipulación y juegan con la necesidad de la gente», declaró en su canal de YouTube la cantante, luego de denunciar las graves condiciones laborales y de violencia psicológica que estaban enfrentando con su pareja.
«Viajar no es solo postales bonitas y paisajes soñados. A veces, las cosas se ponen difíciles, pero siempre hay una enseñanza detrás. Gracias por estar del otro lado, por acompañarnos en cada paso de esta aventura», dijo agradecida a todos sus suscriptores.
