La Inteligencia Artificial y el futuro del trabajo

Según la entidad gestora del Foro Económico de Davos, 85 millones de empleos se han perdido a nivel global, pero se habrán generado otros 97 millones en los sectores de inteligencia artificial y robotización.

El debate ya se instaló en las redes y por el momento ocupa gran parte de la discusión el aspecto creativo pero lo cierto es que la Inteligencia Artificial llegó a nuestra vida cotidiana para quedarse.

Los debates más comunes tienen que ver con nociones de obra, arte y artista, en un contexto donde a través de la programación, se pueden generar imágenes que antes hubieran tardado mucho más tiempo en ser recreadas. También aparecieron las primeras voces generadas de forma totalmente virtual, las aplicaciones ya han tenido un fuerte impacto en videojuegos y otras experiencias similares.

Pero si hablamos de materia económica, los números también están siendo importantes en este nuevo paradigma. La institución que organiza el Foro de Davos estima que en 26 grandes economías estudiadas se habrán perdido 85 millones de empleos, pero se habrán generado otros 97 millones en los sectores de inteligencia artificial y robotización.

Bastarán apenas cinco años para que los robots hagan la mitad del trabajo que hoy les corresponde a los humanos, es la conclusión de un estudio del Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés) sobre las consecuencias de la pandemia sobre el mercado laboral.

Los robots destruirían 85 millones de puestos de trabajo en empresas medianas y grandes en al menos 15 industrias, pero también podrían adicionar 97 millones en sectores como la inteligencia artificial o la creación de contenidos.

Y es que la crisis sanitaria global ha aumentado el interés por adoptar la robotización, de acuerdo con una encuesta realizada a 300 empresas en 26 economías.

Saadia Zahidi, directora gerente del Foro Económico Mundial, afirmó que “los robots y los algoritmos trabajarán como personas. Sin embargo, eso no significa que no surgirán nuevos trabajos (…) Hay nuevas tareas que solo los humanos pueden realizar”.

Una de las ventajas, subraya Zahidi, es que para los ahora llamados trabajadores de “primera línea” o esenciales, podría haber una presión salarial al alza, pues la pandemia visibilizó su importancia dentro del mercado laboral.

Alrededor del 43% de las empresas encuestadas estaba preparado para reducir su fuerza laboral debido a la integración de tecnología, el 41% planeaba expandir el uso de contratistas y el 34% preveía expandir su fuerza laboral debido a la integración de tecnología, según el análisis.