La historia de éxito de Yani Solfer

Creadora de contenidos de estilo, creadora de sorteos innovadores y creadora de sueños personales. Hoy, la influencer, nos cuenta como inició esta aventura desde la conquista de las redes sociales, hasta ser una referente de estilo.

“Fashion lover and content creator”, dos actividades que mejor la definen a esta bella influencer, creada y moldeada durante una difícil época para los argentinos: la pandemia por el Covid-19. Pero eso no la detuvo y durante los últimos dos años, dio vida a “Soy Solfer”, su marca personal.

Hoy, 30 mil personas no solo la siguen, la aman, confían en su estilo y disfrutan todas las semanas de sus sorteos: “celebrar las 30 mil personas que hoy forman parte de esta comunidad que no tengo quejas, les agradezco un montón. Siempre, siempre la mejor conmigo”.

“Bueno siempre me parece un buen momento para recordar cómo empezó todo esto”, dijo en sus historias: “hace dos años, cuando la pandemia empieza, yo estaba esperando un trabajo que no me salió. Obviamente, porque en pandemia nadie me iba a contratar. Pasó un mes entero, y llegamos a fines de abril, principio de mayo, yo ya había comprado suficiente ropa como para… Siempre me gustó comprarme ropa y zapatos. Seguía comprando, online, compraba, compraba, compraba, y un día digo… Tenía tres días de depresión mal, onda que mirabas y te digo… No entendías que hacías ahí, ¡incluso con mis hijos y todo!, es como que yo estaba muy triste”.

Del “¡Basta Yanina!”, el camino se allanó y “empecé a armar looks. Pasaba que yo veía acá en Posadas, personas que me gustaban mucho como se vestían, pero no me daba como para preguntarles ¿dónde te compraste ese jean?, ¿dónde te compraste esa campera? Porque antes acá era como que mal visto, la gente decía ¡ay ya me quiere copiar, ésta! (gracias a Dios esos tiempos han cambiado), entonces dije: “eso yo voy a hacer, voy a comprarme algo, voy a etiquetar en la foto donde me compré las cosas, porque por ahí en algún momento”, yo pensaba en que las mujeres tengan un lugar, que sería mi cuenta, y pudieran ir ahí”.

“¡A mí en mi vida, se me cruzó por la cabeza que pudiera ser influencer! y mucho menos de moda, pero uno empieza bien subiendo fotos, a veces me peleaba con amigas subiendo esto y te tiraba abajo y te va a pasar que el día que vos te animes a hacer algo diferente a lo que estaban acostumbrados a ver todos, te va a pasar de que la gente salga a criticarte, pero cuando uno tiene confianza en uno mismo, cuando vos decís, ¡pará! esto puede funcionar, cuando yo estoy segura que puede funcionar y sobretodo, no me voy a quedar con las ganas de haber probado”, señaló a modo de reflexión.

Dando buenas vibras a quienes inician el camino del influencer y de la creación de contenido, Yani advirtió: “me costó algunos meses y sobretodo la única persona esta acá presente (señalando a su mamá), que me banco de principio a fin. Costo varios meses empezar a hablar a cámara, y ¡ahí si Mabel! que te van a dar peor jaj pero que se yo, el que esté libre de pecado ¡que tire la primera piedra, loco! porque acá nadie puede salir a opinar nada de nadie. No entiendo esa gente que apenas te conoce y va y opina sobre tu vida, sobre tu pasado, que ni les importa, porque no tienen ni idea de lo que uno tiene dentro, de cumplir lo que uno tiene en la cabeza. También he peleado con Matias (su pareja), varias veces por esto, pero si ustedes sienten que puede funcionar, no importa lo que diga la gente, ustedes, lo van a lograr”, cerró.

Hoy la guerrera del contenido digital, disfruta del apoyo de su comunidad, los ayuda y empatiza con las diferentes situaciones que atraviesa cada uno. Yani Solfer no solo creo una marca personal sino también un espacio de interacción continua, de agenda y de estilo que conquista día a día las redes.