Azul Nieto, una activista que se hizo escuchar

Siendo una de las noteras más queridas en la pantalla de Canal 12, Azul creó una comunidad en sus redes sociales, donde comparte su lucha cotidiana por generar conciencia ambiental.

Entre las personas destacadas que habitan y trabajan por el futuro de nuestra Tierra sin Mal, sin dudas se encuentra Azul Nieto. Ya se trate de arte, música, medio ambiente y activismo, es probable que puedas encontrarla involucrada a la notera de Canal Doce, porque esta persona tiene una vocación irrefrenable por ayudar a los demás.

Desde muy pequeña, Azul tuvo la curiosidad a flor de piel y cuenta que además de ver dibujos animados en la televisión, amaba ver documentales de Discovery Channel sobre la naturaleza. “Miraba cómo mataban a las ballenas y lloraba, pensaba que alguien debería hacer algo” cuenta sobre su temprana sensibilización.

A su vez, la influencer siempre estuvo involucrada en todo tipo de gestión. Era delegada de su curso, participaba de todas las olimpiadas escolares, realizó con sus compañeros un modelo de Naciones Unidas y hasta tuvo un paso de activismo a través de su grupo de la Pastoral. A través de su primera participación en el Foro ODS, sintió que pudo tomar las riendas de uno de los temas principales en su vida.

Si bien hoy en día la religión ocupa otro lugar en su vida, continúa haciendo su tarea desde otro lugar. “Es una gran satisfacción, suena tan cursi pero es verdad, más allá de todo el cansancio sentís que vale la pena” cuenta sobre su compromiso diario. Incluso admite que le cuesta enfrentarse a su propio tiempo libre: “es difícil que yo esté sin hacer nada, más allá de mi persona y mi vida personal, necesito estar en movimiento porque me aburro”.

Una de las grandes oportunidades llegó cuando la llamaron desde Canal 12 por su participación en contenidos de un formato que llamó Pop Up, donde compartía sus conocimientos sobre medio ambiente y cultura circular. “Siempre viví en el centro y cada vez que pasaba por la puerta del Canal, te juro que pensaba que algún día iba a trabajar ahí” confesó.

Azul es consciente de la mística que tiene su trabajo en la televisión misionera por el cariño que le manifiestan las personas cuando sale a la calle, pero no se hace mucho problema por la idea de ser “famosa”. Para ella sigue siendo una gran chance para seguir hablando y poniendo en agenda los temas más sensibles de las nuevas generaciones. “Muchas veces veo cómo es la situación en otras provincias, otros países y nosotros estamos tan avanzados aquí que lo único que pienso es bueno, sigamos por ahí” cuenta sobre las políticas provinciales en materia de medio ambiente.

La trampa es caer en el pensamiento de que está todo hecho, explica, y el desafío sigue siendo profundizar en todo lo que se puede seguir logrando a través del Estado y las diferentes instituciones que se involucran en esta causa por la que lucha tanto. “No tenemos que naturalizar la calidad de nuestro ambiente local, que podamos respirar un aire limpio, tomar agua de la canilla es algo imposible en muchos lugares del mundo y nosotros lo podemos hacer sin enfermarnos” conceptualizó.

Sobre cómo se ve creciendo a futuro, confiesa que le cuesta pensarse demasiado lejos de la capital. Azul nació en Posadas, y si bien le gustaría conocer el mundo, estudiar y vivir otras experiencias con respecto a su actividad, también admite que siempre volvería a su ciudad natal para poder aplicar todos esos conocimientos aquí. “Aquí está mi gente, las personas que quiero y es la realidad que conozco, no entiendo por qué me tendría que ir a ayudar a personas de otro lugar. A veces escucho mucho eso de que todos se quieren ir pero para mí no hay nada como sentirse parte” concluyó.