Recientemente, el economista, político radical, ex presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA) entre 2002 y 2004 y exministro de Hacienda durante la gestión de Juntos por el Cambio, Alfonso Prat Gay, disertó en Posadas sobre “Las claves del futuro” invitado por la UCR Misiones.
Previamente fue entrevistado por distintos medios locales frente a los que coincidió en que uno de los principales problemas que aquejan al país es el alto nivel inflacionario, por lo que, para remediarlo consideró que el próximo gobierno “debe pensar en propuestas a largo plazo, con una política integral”.
En diálogo con El Territorio sostuvo que una de las medidas necesarias para revertir la problemática es “una independencia del Banco Central, en la que no haya miembros ni amigos ni hayan participado en gobiernos anteriores”. En esa línea apuntó contra la gestión de Alberto Fernández: “hay una gran preocupación y se está manifestando con los niveles de inflación actuales y eso hace que desaparezca el futuro, donde todo se concentra en el presente y hay una destrucción del valor y del capital humano”.
También cuestionó la gestión de Sergio Massa por la incesante acumulación de reservas “pagando de más a los exportadores de soja en detrimento del productor”, la liquidación de la cadena de producción de alimentos y el sistema de tipo de cambio múltiple.
“La causa de la inflación es el desgobierno y la emisión que hay”, afirmó Prat Gay y al realizar una autocrítica de su gestión recordó que “no se cumplieron todas las promesas que se planteó” desde el espacio político que gobernó entre 2015 y 2019, liderado por Mauricio Macri.
Considerando el panorama económico actual, deslizó: “hay que trabajar en un crecimiento que sea sostenible y coherente, que le saque el peso a los productores y emprendedores, que los ahorros que se logren se apunten a inversión y trabajo. Es clave recuperar la cultura de trabajo y de eso dependerá el próximo gobierno, además de pensar en un programa de estabilización y de un crecimiento educativo”.
La definición de “cultura del trabajo” también la trasladó a la entrevista que concedió a Primera Edición, donde además reconoció “da bronca ver gente cobrar sin trabajar”, por lo que propuso reconvertir los planes sociales en empleo y corregir la macroeconomía para recuperar inversión privada.
“Creo que desde la crisis de la convertibilidad en adelante, lo que era un paliativo transitorio para una franja grande de la población que quedó fuera del sistema, que era el Jefes y Jefas de Hogar, finalmente se transformó en una ayuda permanente y después en lo contrario a una ayuda. No solamente los que están atrapados dentro del plan sino los que están remando para salir adelante ven la natural bronca de que hay gente que cobra sin trabajar”, puntualizó.
Y agregó: “Tenemos que ir a un sistema donde mantenemos la solidaridad porque hay muchos que hoy no acceden a un trabajo, pero con responsabilidad, eso va a dignificar el trabajo. La Argentina fue grande cuando hubo cultura del trabajo, no hay sociedad que se desarrolle sin trabajo y eso es lo más urgente a recuperar”.
En cuanto a la educación analizó: “No hay desarrollo sin una educación en frecuencia con las necesidades del siglo XXI, hace falta una revolución educativa. Por supuesto que hace falta ordenar la macroeconomía porque no hay futuro con el 100 por ciento anual, eso requiere una reforma tributaria, una reforma fiscal, independencia del Banco Central, y un programa de desarrollo”.
“Después mantener una red de seguridad social para los que tienen la dificultad de integrarse al mercado laboral, una red de protección del medio ambiente, una política exterior inteligente para conectarse con el mundo y aprovechar la demanda que tienen de nuestros productos, y sobre todo un entramado y un diálogo político que mantenga estas reformas en el tiempo porque no viene al caso si es shock o gradual, el tema es sostener a lo largo del tiempo”.
Zona Aduanera Especial
Respecto al pedido misionero, tomó distancia y afirmó que “En general hay que ser cuidadoso con esas experiencias que en Argentina no han sido exitosas. Lo vimos en San Luis y lo vimos en Tierra del Fuego”.
En este sentido, profundizó: “Cuando se establecen áreas de privilegio, hay gente que se aprovecha de esos privilegios, y en el medio aparece la posibilidad de corrupción y la competencia desleal con los que no están en el sistema. Creo que cualquier área aduanera hay que discutirla a nivel federal. Debe ser un programa a largo plazo, controlado para evitar picardías y vivezas, y que a priori demuestre que el esfuerzo fiscal que hace el resto del país para financiar esa área aduanera justifica en puestos de trabajo ese costo fiscal. No fue el caso de las provincias anteriores. Me cuesta ver que vayan a estar dadas las condiciones”, puntualizó.
Para que funcione considera necesario bajar Ingresos Brutos y dejar de lado las aduanas internas por el alto costo que impacta sobre el sector productivo y las provincias.
Argentina como puerta al mundo
En consonancia con la charla, titulada ‘Las claves del futuro’, Prat Gay planteó que el país debe “integrarse al mundo”, en los próximos años, “ya que muchas de las cosas que producimos en Argentina las necesita el mundo”. “Tenemos que pensar el futuro como potencia de lo que podemos ser y volver a los valores que nos hicieron grande. Volver al trabajo, a la institucionalidad, a la idea de República y del valor de la generosidad. Hay que pensar un futuro distinto”, amplió.|