La resiliencia de Carlos Arce

El Vicegobernador y candidato a senador por Innovación Federal hizo un repaso de su vida y contó su experiencia basada en una palabra: resiliencia. Además, habló de sus sueños y lo que lo hace feliz, su historia como médico y lo que significa Misiones para él.

En su definición, la resiliencia es la capacidad de una persona para adaptarse a las situaciones adversas con resultados positivos. Carlos Arce sabe a la perfección de que se trata y es algo que lleva como estandarte en su vida.

Misionero de nacimiento y médico de profesión, pasó por muchas situaciones que lo hicieron “resiliente”. En esta oportunidad, en por “¿Para qué?”, el streaming de Silicon Misiones y junto a Sebastián Ramos y Paola Rolón contó su experiencia de vida y dejó sabios consejos para los jóvenes que se están iniciando en el mundo universitario.

“La experiencia es lograr superar las cosas que te salieron mal. Yo diría que hasta es necesario que las cosas no te salgan bien para que luego te salgan mejor” deja a modo de enseñanza y despierta la curiosidad de los conductores del ciclo que le piden que vuelva a explicar el concepto, “quiere decir que la segunda oportunidad te va a ir mucho mejor que la primera. La resilencia es un término que a mí me encanta. Eso es algo que te enseña la vida, que a mí me enseñó muchísimo porque muchas cosas me salieron mal y traté de ser resiliente, traté de superarlas y ser mejor que antes”.

Dentro de toda la experiencia vivida, Carlos Arce contó que forjó su educación en la escuela pública, la primaria en la número 3 y la secundaria en el Colegio Nacional. Hizo el servicio militar en Buenos Aires, “estadía que se prolongó un poco por el conflicto del Beagle” recuerda. Estudió medicina, se recibió e hizo la residencia y la especialidad en ginecología. También estuvo en Europa un año gracias a una beca.

“Volví a la provincia en el 94’, después de haber estado mucho tiempo afuera y nunca dudé en volver. Era soltero, tenía trabajo, pero nunca dudé. Siempre amé Misiones, siempre me gustó volver acá. Cuando vine, lo primero que hice fue ir al Hospital donde trabajé gratis durante cuatros años hasta el 98” cuenta a modo de anécdota para ir metiéndose lentamente en la parte política.

“En ese momento los números y la salud de Misiones me dolían mucho. Yo había venido de un sistema de salud tan distinto y acá no era bueno. En el año 98 me fui porque no andaba la cosa y tenía mucho trabajo en el privado”, advierte con un dejo de resignación por las políticas implementadas por aquellos años en Misiones. “En el año 2003 empecé a ver ciertos cambios en la Salud Pública. Con este gobierno que ha hecho muchísimo, y los números lo dicen. Fui presidente de la Sociedad de Ginecología mucho tiempo y empecé a tener contacto con la salud pública y ahí vi con otros ojos cómo este gobierno tenía como prioridad a la salud” agrega.

¿Tuvo sueños?

Totalmente distendido y mirando hacia el pasado cuante que su sueño es haber sido jugador de fútbol profesional. Estuvo cerca, llegó a jugar en la reserva de San Telmo, en Buenos Aires, en Posadas visitó los colores auriazules de Bartolomé Mitre. “Mi sueño era salir por el túnel hacia el campo de juego y no tanto por la ovación o el calor de la hinchada, sino simplemente por patear una pelota” cuenta este hincha de Boca que espera con ansias el 4 de noviembre para festejar la 7ma Copa Libertadores y advierte que cree en las coincidencias que se dan con el número 7, “hay fe, hay corazón y hay hinchada”.

La felicidad de ayer y la de hoy

Quedándose en ese pasado por un rato, Arce cuenta que una de las cosas que lo hacían más feliz cuando era niño era escaparse para jugar el fútbol bajo la lluvia, pese al reto posterior de la madre.

Hoy la felicidad pasa por otros contextos, por un lado su familia, la cual lo contiene y lo apoya en cada paso que da desde que está en política. Por el otro, tener la posibilidad de mejorarle la vida a la gente “a veces con pequeñas cosas, visitando a un vecino y solucionando un problema. Me hace feliz saber que soy una herramienta para llegar a eso».

Finalmente, la pregunta lo conmueve ¿Qué le gusta transmitir a sus hijos? Allí, el doctor Arce no duda, “el ejemplo” contesta con total seguridad y lo justifica, “es algo fundamental. Los hijos son mucho más inteligentes, perceptivos y sensibles de lo que uno piensa como padre. Entonces vos podés hablar, hablar con ellos. Pero el ejemplo es fundamental en los padres. Fundamental”.