Gestión mata marketing

El 7 de mayo hubo una ratificación, la gente eligió su bienestar y el buen rumbo por sobre la falta de ideas y proyectos claros. Con la mira en las nacionales de agosto, varios presidenciables ya miran hacia la Tierra sin Mal para ser acompañados por la Renovación.

Los resultados están a la vista y son claros. La gran mayoría de la sociedad misionera fue contundente en las urnas y priorizó su realidad por encima de un modelo que solo ofrecía fotos y marketing a baja escala.

En bares, oficinas y calles las discusiones políticas van orientadas hacia un solo lado: el efecto demoledor de las urnas que hizo detonar en pedazos a Juntos por el Cambio de Misiones y el posterior silencio y encierro entre sus dirigentes que no felicitaron al ganador ni reconocieron el resultado.

Es evidente que a diferencia del contexto nacional, en Misiones a la oposición no le fue suficiente con instalar el discurso de la bronca para captar votos. Casi 300 mil votos de diferencia y 45 puntos de distancia entre un modelo de gestión que trabaja con resultados a la vista y otra propuesta que solo ofrecía fotos y marketing.

Es que quien fue a votar el 7 de mayo, bajo una lluvia que no dio tregua durante toda la jornada eligió con la certeza de seguir por la buena senda, en vez de optar a una aventura desconocida. Es un hecho: la gente no quiere cambiar por cambiar.

De cara a las elecciones nacionales se viene dando un fenómeno particular, el triunfo de los oficialismos marca la tendencia de lo que se vino votando en cada una de las provincias. Respecto a Juntos por el Cambio, salvo en Jujuy, perdieron en todos lados porque han demostrado, principalmente Macri y Larreta, su desprecio por las provincias y los ciudadanos del interior. Es más, lo grave que es que el ex presidente haya declarado recientemente que los del interior “no saben votar”.

La novedad en este punto es que varios presidenciables buscan instalar su nombre en la provincia y por eso, atraídos por un modelo político que penetró en la gente ya telefonearon para tener al Frente Renovador en su boleta.

Por el lado del Gobierno Nacional se encuentra trabajando en dos frentes: por un lado renegociando deudas que dejó Macri para mitigar el impacto de la inflación y por otro buscando rearmar una estrategia electoral donde se posiciona Sergio Massa con más chances de ser el candidato único. La gente no lo ve como el responsable de la inflación y su mérito es haberse sacrificado para agarrar la economía en crisis, una crisis que él no generó, pero se ofreció a gestionar con todo el riesgo político que implica para su carrera. Básicamente, se tiró poniendo el cuerpo arriba de la bomba. La oposición ya tuvo la oportunidad de gobernar y lo hizo mal.

La gente perdió la confianza en el esquema de Juntos, sobre todo porque no tienen ninguna propuesta para salir de la crisis y pretenden llegar al Gobierno sin avisarle a la gente lo que pretenden hacer, como fue en 2015 y como intentó Juntos en Misiones el pasado 7 de mayo. Por eso la gente los abandona y se inclina por otras opciones, entre ellas Javier Milei.