Al momento de analizar qué fue lo que caracterizó a este año legislativo, el concejal de Posadas por Juntos por el Cambio, Pablo Velázquez, mencionó las “complicaciones económicas” que se dieron a nivel nacional e impactaron en la Tierra sin Mal, pero también se enfocó en las rispideces que dificultan la «convivencia política» dentro del Concejo Deliberante de la Ciudad.
“Este fue el año en que más costó comprender el diálogo, el juego y los roles que tiene la política y que tenemos que cumplir cada uno dentro del cuerpo legislativo. Es un punto a mejorar el año que viene”, sostuvo Velázquez entrevistado por Canal Cuatro.
Luego, profundizó: “Cuesta la convivencia, el diálogo, la confianza. Creo que la condición de apertura, de escuchar a todos, y de encontrar puntos de equilibrio y balances en todo cuerpo legislativo es fundamental para que pueda existir la buena convivencia y se puedan realizar cosas concretas”.
En cuanto a su gestión dentro de Juntos por el Cambio, celebró: “Logramos sacar el Código de Procedimientos de Faltas Municipal. No fue tarea fácil porque hubo que escuchar a muchos sectores, abrimos lo más que pudimos la mesa”, dijo sobre la ordenanza que una vez aprobada permitirá mejorar la atención en los juzgados de faltas.
También recordó que se avanzó en el régimen de penalidades del municipio: “Nuestro régimen de penalidades está sujeto al precio del combustible de mayor valor y estamos hablando de una ordenanza de cuando el combustible valía $12, cuando hoy cuesta $220, con lo cual nuestras multas están demasiado elevadas”.
Taxistas Vs. Uber
En cuanto a la problemática de los taxistas, consideró necesario modificar la manera en que se determina el costo del taxi: “creo que es el único servicio que no se tiene en cuenta. Los concejales cuando marcan el precio no tienen en cuenta la cantidad de pasajeros que utilizan el servicio ni las distancias”, reclamó.
Luego, amplió: “Las distancias dentro del centro deberían ser más caras y a mayor distancia hay que bajar el costo”, sostuvo al cuestionar el sistema de banderas y afirmó: “Por eso hoy tomarse un Uber del centro a Itaembé Miní te vale $1500 y tomarte un taxi a la misma distancia te vale $3000”.
“Si no cambian la manera de ver la actividad se van a fundir porque el mercado y la incorporación de Uber los dejarán de lado. La gente va a elegir lo que les sale más barato”, reafirmó.
También refirió a la falta de cupos para incorporar servicios de taxi en Posadas: “El artículo 73 explica que debe haber un móvil cada 600 habitantes y es algo que ya quedó vetusto. Hoy existen alrededor de 800 taxis habilitados en la ciudad con lo cual el cupo ya está afuera”.
A lo que agregó: “También hay una mentira cuando se dice que con la ordenanza se van a poder incorporar los Uber y no, porque mientras figure ese artículo con esa limitación no hay posibilidad de que se sigan incorporando nuevos vehículos a la flota de taxis ni remises en la Ciudad”.
“Hay que eliminar ese cupo y permitir que el que quiera tener un taxi vaya a la Municipalidad a pedir la habilitación. Tenemos que adaptarnos a los tiempos que corren y dejar de estar obligados a pagar por un mal servicio”.
Con miras al 2023
En otro tramo de la entrevista, recordó: “Yo siempre digo que quiero ser intendente de Posadas, pero no quiero ponerle palos en la rueda a nadie porque vivo en esta ciudad y quiero que a Posadas le vaya bien, pero uno espera que las opiniones, las ordenanzas y las propuestas sean tomadas con seriedad dentro del HCD”.
Con esas palabras volvió a reiterar la falta de diálogo dentro del espacio legislativo y “los códigos” políticos que impiden el avance de proyectos. De todas maneras, coincidió en que “fue un año productivo” en cuanto a la presentación de iniciativas, aunque resaltó que “todavía queda mucho por hacer” en materia de generación de empleo y solución habitacional.|
