A vapear a otro lado

Un proyecto de ley alertó sobre la peligrosidad del hábito y refutó las teorías iniciales. De aprobarse, el Ministerio de Salud Pública será el encargado de aplicar, informar y concientizar a la población sobre esta práctica.

Días atrás el médico y responsable del Programa de Control de Tabaco de Misiones Guillermo Rolón explicó en diálogo con medios locales que la idea instalada en un comienzo, según la cual se presentaba al cigarrillo electrónico como un “método para dejar de fumar” es totalmente errónea. Y aclaró: “No es un método para dejar de fumar, al contrario, provoca una serie de complicaciones porque también tiene nicotina, favorece y aumenta el hábito del tabaquismo sumando otras sustancias como aromatizantes que también se le ponen”.

Según el profesional, la edad promedio de primer uso de este tipo de cigarrillos se da a los 12 años y el consumo aumentó considerablemente en el último tiempo.

“El daño que genera en el organismo humano se produce por la combustión y el calentamiento, provocando un grave impacto sobre el aparato respiratorio y las fosas nasales”, agregó el profesional.

Camino al debate

El diputado Rafael Pereyra Pigerl presentó un proyecto que ya se encuentra en el Boletín de Asuntos Entrados (BAE) de la Legislatura misionera. Ahora deberá ser debatido por los diputados para aprobar o rechazar la propuesta.

En uno de sus artículos establece: “Se prohíbe el uso de los cigarrillos electrónicos y todo otro dispositivo de naturaleza similar en lugares cerrados de acceso público, quedan exceptuados los patios, terrazas, balcones y demás espacios al aire libre de los lugares cerrados de acceso público. La excepción no es aplicable a establecimientos educativos”. En otro artículo señala que el Ministerio de Salud Pública de Misiones será el encargado de la aplicación y el responsable de realizar campañas de información y concientización sobre los riesgos de utilizar estos dispositivos.|